Con una cifra de USD 19.500 millones en financiamiento para América Latina y el Caribe, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estima cerrar el año.
El BID ayudó a los países a recuperarse de la pandemia y dar paso a una era de crecimiento sostenible e inclusivo.
Se trata de la segunda ayuda anual más importante que ha realizado el BID, en materia sanitaria, cambio climáticos, cadenas de suministros y educación
“La financiación también ayudará a reducir la desigualdad de género, ampliar los ecosistemas empresariales, y empoderar a las pequeñas y medianas empresas, que representan más de dos tercios de los empleos de la región”, dijo en una nota de prensa.
La combinación de las aprobaciones de préstamos del BID (US$14.000 millones), los compromisos financieros previstos de BID Invest (US$5.500 millones) y las movilizaciones del sector privado (US$2.800 millones) alcanzan un total de US$22.300 millones.
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“Este año hemos demostrado cómo un BID del siglo XXI puede empoderar a los países para superar retos inimaginables y dar paso a una nueva década de prosperidad. Lo hicimos escuchando atentamente a nuestros clientes y países miembros, y aprovechando nuestro capital humano excepcional para crear financiamiento innovador y alianzas con el sector privado que acelerarán la recuperación de la región”, dijo Mauricio Claver-Carone, presidente del organismo.
“La pandemia generó desafíos sin precedentes, pero también abrió oportunidades históricas para que América Latina y el Caribe crezca, especialmente en áreas que incluyen la digitalización, el nearshoring y las cadenas de suministro; y estamos orgullosos de enfocarnos en ayudar a los países a aprovechar esas oportunidades”, agregó.