Las sanciones impuestas por Estados Unidos y aliados a Rusia ante la invasión de Ucrania, provocaron que el camino hacia la recuperación económica tras las secuelas del coronavirus, sea más complejo para el Kremlin.
Elvira Nabiúllina, presidenta del Banco Central de Rusia, dijo que las restricciones de Occidente han afectado principalmente al sector financiero, sin embargo, va en vía de hacerlo con otras áreas.
“Nuestra economía está pasando por un duro proceso de transformación estructural debido a las sanciones. Las sanciones ahora comenzarán a afectar más a los sectores reales de la economía”, aseguró.
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Recordó ante la Cámara Baja del Parlamento, que las sanciones le impiden tener acceso a sus reservas internacionales, necesarias para cancelar sus deudas.
El oro, yuan y otros activos estables, no “permiten administrar el mercado de divisas interno”.
Señaló que “ahora estamos eliminando cuidadosamente algunas de estas medidas. Planeamos flexibilizar un poco las condiciones para las ventas de divisas de los exportadores”.