Con efecto inmediato, India suspendió las exportaciones de trigo con el fin de estabilizar el mercado interno, que se ha visto afectado por la guerra de Rusia contra Ucrania.
La Dirección de Comercio Exterior dijo que la seguridad alimentaria de la nación estaba en riesgo, tras el incremento de los precios en el mundo, que han subido más de un 40% este año.
Rusia y Ucrania representaban un tercio de las exportaciones globales de cebada y trigo. Pero con la invasión, los puertos ucranianos fueron bloqueados y silos destruidos.
La ola de calor también ha afectado los cultivos de trigo en India, el segundo mayor productor del mundo, pero el que más consume.
Entre 2022-2023 tenía como meta exportar 10 millones de toneladas del grano, con los cuales intentaba buscar otros mercados como Europa, Asia y África.