La finlandesa Nokia decidió finalmente despedirse de Rusia, de momento, tras paralizar los suministros en marzo como consecuencia de la guerra contra Ucrania.
A través de un comunicado, la empresa aseguró que existirá una provisión de 108 millones de dólares en las cuentas de enero a marzo.
En 2021, durante el segundo año de la pandemia, Rusia solo representó menos del 2% de los ingresos de Nokia.
“En las últimas semanas, hemos suspendido las entregas, detenido nuevos negocios y estamos trasladando nuestras actividades limitadas fuera de Rusia. Ahora podemos anunciar que saldremos del mercado ruso. Durante este proceso nuestra prioridad sigue siendo la seguridad y el bienestar de nuestros empleados”, explicó la marca.
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Occidente ha mostrado preocupación por los riesgos de que falle la infraestructura crítica de la red de telecomunicaciones en Rusia.
También han enfatizado la importancia de garantizar el flujo continuo de información y acceso a Internet que brinda perspectivas externas al pueblo ruso.
“A medida que salgamos, nuestro objetivo será brindar el soporte necesario para mantener las redes y estamos solicitando las licencias pertinentes para habilitar este soporte en cumplimiento de las sanciones actuales”, se lee en el documento publicado en su página web.
