Un nuevo tipo de medicamento para la obesidad puede ayudar a los médicos, los pacientes y el público a comprender que la obesidad es una afección médica que necesita tratamiento crónico, informó The New York Times.
Las personas con obesidad han sido muy estigmatizadas y experimentan un trato deficiente y sesgos en los entornos de atención médica, a pesar de la evidencia científica que muestra la fuerte influencia de factores genéticos y ambientales sobre el peso corporal individual.
Durante los ensayos clínicos se administró a los participantes, semaglutida, que es una forma de incretina, una hormona natural en el cuerpo que ralentiza el vaciado del estómago, regula la insulina y disminuye el apetito, con efectos secundarios gastrointestinales a corto plazo en su mayoría leves a moderados, según el Times.
En promedio, los participantes que lo tomaron una vez a la semana durante 68 semanas experimentaron una pérdida de peso del 15%, según muestran los resultados de marzo en el programa New England Journal of Medicine.
Un tercio perdió el 20% o más de su peso corporal en el estudio, similar a la cantidad perdida con la cirugía bariátrica de banda gástrica.
Los medicamentos actuales para la obesidad conducen a una pérdida de peso promedio de solo un 5% a un 10%, señala NYT. Por separado, Eli Lilly tiene un medicamento similar llamado tirzepatide, que combina dos incretinas. La compañía dijo que está probando el medicamento contra la semaglutida y espera que resulte aún más poderoso.