El Departamento de Salud de Estados Unidos declaró emergencia sanitaria por la viruela del mono como una medida para combatir más efectivamente la propagación de la enfermedad a nivel nacional.
“Terminar con el brote de viruela símica es una prioridad crítica para la Administración Biden-Harris. Estamos llevando nuestra respuesta al siguiente nivel al declarar una emergencia de salud pública”, dijo el secretario de Salud, Xavier Becerra.
El funcionario indicó que con esta declaración el Gobierno estadounidense podrá acelerar su respuesta para contrarrestar el avance del virus y evitar que avance a un estadio mayor al de brote, como es considerado actualmente.
“El presidente Biden nos ha pedido que exploremos todas las opciones sobre la mesa para combatir el brote de viruela del mono y proteger a las comunidades en riesgo”, enfatizó Becerra.
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La declaración llega pocos días después de que la Casa Blanca anunciara la creación de un equipo de respuesta para hacer frente a la enfermedad.
De acuerdo con el más reciente informe de los CDC, desde que se registró el primer caso a mediados de mayo, 7102 personas en todo el país han contraído la enfermedad.
Aunque es una cifra bastante baja con respecto al número de población en territorio estadounidense, las autoridades están tomando medidas más estrictas porque la viruela del mono ha avanzado mucho más rápido de lo que se estimó en principio.
Hasta ahora, el Departamento de Salud ha entregado a los estados más de 602 000 dosis de la vacuna JYNNEOS, un aumento de 266 000 en la última semana.
La oficina anunció también que acelerará la entrega de 150 000 dosis adicionales que llegarán al país el próximo mes, lo que permitirá que las dosis que estaban programadas para llegar en noviembre lleguen en septiembre.
