Ronald Acuña Jr. estaba jugando “Call of Duty” cuando recibió una llamada de FaceTime del presidente de operaciones de béisbol de los Bravos, Alex Anthopoulos, el jueves aproximadamente a la 1 a. m. ET.
“Le respondí y me preguntó: ‘¿Estás listo para jugar mañana?’”, dijo Acuña a través de un intérprete. “Sabiendo que tenía un juego en Gwinnett, dije: ‘Sí, estoy listo para jugar’. Y él dijo: ‘No, no, ¿estás listo para jugar aquí mañana?’. Yo dije: ‘Oh sí, vamos ahora mismo, estoy listo’”.
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Anthopoulos dijo que nunca olvidará la genuina emoción y alegría que vio cuando Acuña gritó y celebró. Casi 10 meses calendario completos después de someterse a una importante cirugía de rodilla, la superestrella de los Bravos recibió autorización para jugar y retomar su papel como uno de los jugadores de élite de la MLB.
Acuña emocionado
Acuña todavía estaba lleno de emoción cuando jugó en el jardín derecho y fue el primer bate en la victoria del jueves por la noche por 5-1 sobre los Cachorros en Truist Park. Esta era la oportunidad que estaba esperando desde el 10 de julio de la temporada pasada, cuando se rompió el ligamento cruzado anterior derecho.
“Es como ser llamado a las Grandes Ligas nuevamente”, dijo Acuña antes de irse de 5-1 con un par de bases robadas.
