“Monotonía” es la vuelta de la mejor Shakira, haciendo arte de su duelo, con una canción que se queda pegada desde el primer segundo, amén de su coro y su ritmo de bachata que acompaña un Ozuna cómplice de una las justicias poéticas del año.
Un video para sanar corazones rotos.
Un hombre abre un hueco en el pecho de la cantante, con una bazuca y ella llora desconsolada, desde una crítica de su vida materialista, que desea superar, hasta cambiando su look y su música de los últimos años.
Así hace una venganza, con estilo, llamando por su nombre al narciso que busca protagonismo en el mercado de la vida, cargándose los sentimientos de la diva. Clase de economía y creatividad emocional.
Y un lujo que guarde su drama en un caja fuerte, para avanzar.
Lleno de símbolos y detalles, un trabajo de depuración que se agradece cuando más predecible es el mainstream.
Shakira renace de sus cenizas, para romper con la monotonía.
Pedazo de obra maestra del despecho. Mis respetos!
Obvio que le están tirando bastante hate. Previsible.
No sé qué más quieren de ella.
Así se genera una conversación en redes, hoy en día. Para tomar nota.