El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, nominará a la jueza Ketanji Brown Jackson para suceder al juez Stephen Breyer en la Corte Suprema.
Brown Jackson está ahora más cerca de convertirse en la primera mujer afroamericana en ocupar una silla en el máximo tribunal del país.
La Casa Blanca informó que el demócrata buscó una candidata con credenciales excepcionales, un carácter intachable y una dedicación inquebrantable al Estado de derecho.
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También que fuese muy parecida al juez Breyer, sabia, pragmática y que con un conocimiento profundo de la Constitución como una carta perdurable de libertad.
Biden estudió las historias y expedientes de las candidatas, se reunió con ellas y consultó con expertos legales.
“El presidente tomó en serio el requisito de la Constitución de que haga este nombramiento ‘por y con el consejo y consentimiento del Senado’, buscando el consejo de los senadores de ambos partidos”, señaló la Casa Blanca.
Una jueza con raíces en Miami
La jueza Ketanji Brown Jackson nació en Washington D.C. y creció en Miami.
Sus padres asistieron a escuelas primarias segregadas en el sur, luego asistieron a colegios y universidades históricamente negros.
Ambos comenzaron sus carreras como maestros de escuelas públicas y se convirtieron en líderes y administradores de las Escuelas Públicas del Condado de Miami-Dade.
Brown Jackson obtuvo su licenciatura en Harvard Law School, donde se graduó cum laude y fue editora de Harvard Law Review.
Después de la facultad de derecho, la jueza Brown Jackson sirvió en las cámaras del juez Breyer, su mentor, como asistente legal.
Antes de servir como jueza trabajó en la Comisión de Sentencias de Estados Unidos, un organismo importante, bipartidista por diseño.
Su trabajo allí se centró en reducir las disparidades de sentencias injustificadas y garantizar que las sentencias federales fueran justas y proporcionadas.
Brown Jackson también se desempeñó como defensor público federal de 2005 a 2007, representando a los acusados en apelación que no tenían los medios para pagar un abogado, por lo que de llegar a la Corte Suprema también sería la primera exdefensora pública federal en servir en el cargo.