Diez días de intensa búsqueda terminaron este lunes luego de que la policía localizara a Casey White y Vicky White, el prisionero prófugo y la oficial carcelaria que lo ayudó a huir de una prisión en Alabama.
La pareja, que mantenía una relación romántica desde hacía dos años, fue encontrada en un motel en Evansville, una pequeña comunidad en Indiana.
Casey y Vicky fueron ubicados luego de que el dueño de un autolavado reportara a la policía que había visto a la pareja en una camioneta y luego en un auto pequeño.
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Un día antes, un agente había detectado un vehículo aparentemente abandonado en un estacionamiento.
Al comparar los datos de la placa, los agentes se percataron de que el auto de la pareja y el revisado el día antes por el oficial eran el mismo.
Se negaron a entregarse
Al ser interceptados por la policía, Vicky y Casey se negaron a entregarse, lo que desencadenó una persecución que duró alrededor de 10 minutos.
Los oficiales persiguieron a la pareja por la autopista hasta acorralarla y lograr que su auto se volcara en una pequeña zanja sin que los ocupantes del vehículos resultaran lesionados de gravedad.
Sin embargo, al verse acorralada por la policía, Vicky White se suicidó de un disparo en la cabeza. Casey White, por su parte, se entregó a los agentes.
“No la maté, lo hizo ella misma”, dijo al salir del auto.
De acuerdo con la policía, el fugitivo dijo en sus primeras declaraciones que su plan era esconderse en algún lugar, pero que luego de manejar tanto decidieron tomarse un descanso en el motel para recalibrar sus planes.
Vicky ayudó a Casey, condenado por asesinato, a escaparse de una cárcel en Alabama el mismo día que se iba a jubilar luego de trabajar 17 años como agente estatal de prisiones.
La fuga de la oficial y el prisionero generó gran conmoción en Estados Unidos, donde no es común este tipo de situaciones.
