El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, determinó que la pandemia de la covid-19 sigue constituyendo una emergencia de salud pública de importancia internacional.
Así lo informó Tedros tras la décima reunión del Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional relativa a la pandemia de la covid-19, que se reunió el pasado jueves 13 de enero en Ginebra (Suiza).
El Comité acordó por unanimidad que la pandemia “sigue constituyendo un acontecimiento extraordinario que continúa afectando negativamente a la salud de las poblaciones de todo el mundo, plantea un riesgo de propagación internacional y de interferencia con el tráfico internacional, y requiere una respuesta internacional coordinada”.
Asimismo, El Comité coincidió con Tedros en que la pandemia sigue siendo una emergencia de salud pública de importancia internacional, y advirtió sobre “el riesgo de declaraciones demasiado optimistas sobre el estado de la pandemia”.
Investigación de vacunas intranasales
Este grupo de expertos, que se volverá a reunir en un plazo máximo de tres meses, también reafirmó la importancia de “acelerar la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías de vacunación”.
“La actual tecnología de vacunación depende de jeringuillas cuyo suministro es limitado, lo que supone una importante carga logística y programática. El rápido desarrollo de fórmulas de vacunas alternativas, como las intranasales, podría aumentar la facilidad de administración en zonas de bajos recursos y/o de difícil acceso. Además, es evidente la necesidad de seguir trabajando en vacunas que confieran una inmunidad más amplia en todas las variantes”, finalizó el Comité.
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Además, estos estudiosos defendieron llevar a cabo investigaciones epidemiológicas sobre la transmisión del SARS-CoV-2 entre hombres y animales, así como una vigilancia específica de los posibles huéspedes y reservorios animales.
“La vigilancia en tiempo real y el intercambio de datos sobre la infección, la transmisión y la evolución del SARS-CoV-2 en los animales contribuirán a la comprensión global de la epidemiología y la ecología del virus, la posible evolución de nuevas variantes en las poblaciones animales, su identificación oportuna y la evaluación de sus riesgos para la salud pública”, justificaron.
Igualmente, hicieron un llamado a “levantar o suavizar las prohibiciones de tráfico internacional, ya que no aportan ningún valor añadido y siguen contribuyendo al estrés económico y social que sufren los Estados”.
“El fracaso de las restricciones de viaje introducidas tras la detección y notificación de la variante ómicron para limitar su propagación internacional demuestra la ineficacia de tales medidas a lo largo del tiempo. Las medidas de viaje (por ejemplo, el uso de mascarilla, las pruebas diagnósticas, el aislamiento/cuarentena y la vacunación) deben basarse en evaluaciones de riesgo y evitar que la carga financiera recaiga sobre los viajeros”, añaden al respecto.