Las protestas y cierre de las carreteras en varias regiones de Panamá continúan a pesar del inicio en las negociaciones con el Gobierno de Laurentino Cortizo.
Autoridades, gremios y sindicatos de ese país se mantienen en protesta por el elevado costo de vida; además de exigir medidas contra la corrupción y el despilfarro de los recursos del Estado.
Uno de los detonantes de las protestas fue que el precio de la gasolina superara los US$ 6 por galón.
Con 4,2 millones de habitantes, Panamá experimenta una de las mayores crisis sociales desde que en 1989 cayó la dictadura militar del general Manuel Antonio Noriega. El descontento se produce en un escenario con 4,2% de inflación interanual registrado en mayo, una tasa de desempleo en torno al 10% y un aumento en el precio del combustible que, desde inicios del 2022, llegó a ser del 47%.
Medidas del Gobierno contra las protestas
El Gobierno de Panamá aprobó esta semana nuevas medidas que buscan dar un alivio económico a la sociedad a través del congelamiento del precio de la gasolina, la asignación de un precio tope a una decena de productos más de la canasta básica e implementar 10 medidas de austeridad en adición a las antes ejecutadas, informó el miércoles la Presidencia en un comunicado.
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El Consejo de Gabinete de Panamá aprobó las medidas para “frenar el aumento de la canasta básica y asegurar el abastecimiento de alimentos”.